

La figura del asno se acepta actualmente de forma ortodoxa como símbolo a veces de la ignorancia como en "Sueños de una noche de verano" de Shakespeare o en Pinocho y otras, de la humildad y la confianza de la amistad como en las fábulas de Esopo o el burro amigo del ogro Shrek. Pero como en todos los símbolos, encontramos muchos niveles de comprensión y por ejemplo Orwell lo presenta intelectual en "Rebelión en la granja" o en el cuento "Los músicos de Bremen" es el músico que empieza a buscar compañeros para su grupo. Especial predilección tiene justamente en la iconografía medieval el asno como músico por lo que los maestros canteros le hacen aparecer en muchísimos iglesias y catedrales. "El asno de oro" de Apuleyo da pistas importantes para quien se adentre en sus palabras y no tema traspasar líneas conocidas. Y el cristianismo ilustra tres pasajes: la virgen encinta en su viaje a Belén subida en un asno, la virgen y Jesús en la huida a Egipto y Jesús alabado como el Mesías en su entrada a Jerusalem. Pienso en la humildad y creo que sólo la energía pura de lo Femenino representada por la Virgen sea gestante de creatividad o Madre, protegiendo su creación, pueden subirse al burro de la humildad sin temor a dejarse llevar por el orgullo, la soberbia o la prepotencia. Solo un ser humano ascendido y centrado, con plena conexión con su espíritu, en el que tanto el alma como su personalidad y cuerpos son canales de éste, puede entrar en la Ciudad de la Paz, consciente de sí y recibiendo alabanzas con palmas con alegría y serenidad, con toda la Fuerza y la Templanza en si. Creo que se puede releer tanto la obra de Shakespeare como tantas otras en las que el asno está presente a la luz de estas ímagenes. Y volviendo al Pesebre de nuestra constelación de Cáncer. Una casa iluminada. El hogar más humilde, en el que come el asno para recibir el nacimeinto de la Luz. La intuición que vamos persiguiendo para poder acceder al Conocimiento y Sabiduría , esa Luz que iluminará nuestro cuerpo, nuestra casa, nuestra ciudad, nuestro planeta y todos nuestros mundos ... es a través de la humildad y el trabajo y el esfuerzo. ¿Quién camina junto a la Virgen, conduce y conoce el camino, quien la protege a ella y a Jesús sino José? Lo masculino, el intelecto y la razón al servicio de la Luz. Y así, tanto individualmente, como colectivamente iremos construyendo la Casa Iluminada.
Autor foto: Carlos Andrés Rivera